"¿Acaso estabas pensando en la posibilidad de susurrar en voz baja a la oreja del mundo sordo que te rodea? No, amigo mío, debes gritar. Grita desde tu corazón lo que has visto y hazlo lo más fuerte que puedas." K. Wilber

viernes, 4 de septiembre de 2009

Sin resistencia


"He practicado la meditación, he ido a talleres, he leído muchos libros sobre espiritualidad, intento estar en un estado de no resistencia, pero si usted me pregunta si he encontrado paz interior verdadera y duradera, honestamente debo contestar que no. ¿Por qué no la he encontrado? ¿Qué más puedo hacer?

Todavía está buscando afuera, y no puede salir del estado de búsqueda. Quizá el próximo taller tendrá la respuesta, quizá esa nueva técnica. Yo le diría: no busque paz. No busque ningún otro estado que ese en el que se encuentra ahora; de lo contrario, establecerá un conflicto interior y una resistencia inconciente. Perdónese a sí mismo por no estar en paz. En el momento en que usted acepte completamente su falta de paz, se transmutará en paz. Ese es el milagro de la entrega."

- El poder del Ahora -

martes, 1 de septiembre de 2009

Rastros del Ser


Los sabios nos enseñan que la Iluminación está acá nomás, los místicos nos recuerdan que Dios está cerca, es más, en nuestro propio corazón. Que buscar el Ser es como cuando el pez recorre el océano buscando el agua. Bien. Al decir de Alex Rovira: “Lo obvio es justamente lo obviado!”
Nos queremos dejar de identificar con una falsa forma que nos trae dolor totalmente innecesario, pero ¡no es tan fácil desde el medio de la ilusión, de la ignorancia que justamente, nos tapa esa verdad!
¿No habrá dejado el Ser algún rastro para que lo encontremos?
Porque no es como cuando una persona está histérica, fuera de sí, y le pegamos un cachetazo para que vuelva, para que reaccione. Algunos maestros pegan palazos, pero no sé cuán efectivos pueden ser para despertar conciencia… ¡Ojalá un cachetazo nos despertara de este sueño de identificación con el cuerpo y la mente! ¡Me pondría primera en la fila!
A no desesperar. Afortunadamente, algunas cosas reflejan mejor la luz de la Esencia e invitan a experiencias que nos dan vislumbres de aquello que ES detrás de lo que nosotros proyectamos.
Cuando nos conmueve la belleza de lo inmenso, lo perfecto, lo armonioso de la naturaleza, se nos presenta una puerta de acceso al Ser, ya que sólo podemos apreciar la belleza en el presente, la mente se detiene y “¡Ahh!” exclamamos absortos.
Otro portal de conexión se da a través de la risa. No nos podemos reír ni en el pasado ni en el futuro. Una vez, un experto en comunicación durante un seminario en el que me encontraba explicó cómo la risa es un vehículo fantástico para aprender. Lo que aprendemos riendo, rara vez lo olvidamos. La risa nos acerca a la conciencia, porque al menos para reír, tenemos que estar concientes.
¡Que “Ahh!” y “Ja ja” sean nuestros próximos mantras!